El papa Francisco, que tiene previsto visitar Irak en marzo, condenó el jueves un doble atentado suicida que mató al menos a 32 personas en un mercado de Bagdad como un "acto de brutalidad sin sentido".

La televisión estatal iraquí, la cual cita a la cartera de Interior, informó de que el número de víctimas mortales ascendió a 28 y el de heridos a 73, en lo que fue calificado por las autoridades como un "ataque terrorista suicida".

Periodistas de Reuters que llegaron poco después de las explosiones vieron charcos de sangre y zapatos tirados en el lugar, un mercado de ropa en la plaza Tayaran, en el centro de la ciudad.

En redes sociales se difundieron imágenes y vídeos del ataque, que contienen imágenes fuertes.

El último balance comunicado por el ministro de Salud, Hasan al Tamimi, da cuenta de 110 heridos y 32 fallecidos, los mismos que perdieron la vida en el mismo lugar.

"La mayoría de los heridos recibieron tratamiento y salieron de los hospitales, y sólo quedan 36 para recibir tratamiento adicional", agregó.

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Sin embargo, esta tendencia se rompería con una jugada que arrancaría Ronaldo y terminaría en el 1-0 histórico. El gol de los juventinos obligó a la reacción del equipo dirigido por Gennaro Gattuso.

Aseguró que algunos de los heridos están en estado crítico, de modo que la cifra de muertos podría aumentar.

Por su parte, el portavoz de las Fuerzas Armadas iraquíes, Yahia Rasul, dijo que los dos terroristas cometieron el atentado cuando los efectivos los perseguían en la zona de Bab al Sharqi, en el centro de la capital.

Este atentado fue condenado por el presidente de Irak, Barham Saleh, que escribió en Twitter que las autoridades están "plantando cara con firmeza a estos intentos de desestabilizar el país" y atribuyó la autoría del ataque a "grupos oscuros".

Desde entonces, las células yihadistas se han estado escondiendo en áreas montañosas y desérticas del país.

El último ataque suicida en la capital ocurrió en mayo de 2019, cuando ocho personas murieron y 15 resultaron heridas después de que un terrorista suicida hizo explotar su cinturón en un mercado popular del barrio de Ciudad Sadr, este de Bagdad, cuya población es mayoritariamente chií.